Esta iglesia fue construida en el siglo XVII sobre el antiguo templo medieval de la localidad, aunque el actual aspecto barroco es del siglo XVIII. Una vez dentro, destaca el interesante fondo museístico de la parroquia que guarda diferentes piezas de escultura, orfebrería y pintura de temática religiosa. También impresiona el conjunto pictórico del retablo mayor que versa sobre la figura de Simó Pere. A sus pies se sitúa el campanario, con más de 200 años.